El Arte Parpallones fue desarrollado por la población prehistórica valenciana a lo largo de 25.000 años.
En la comarca de la Safor hay una cueva cuyo nombre es del Parpalló, se encuentra situada en el centro del Nontdúber, este arte se fue desarrollando durante los 13.000 años de ocupación de la cueva, siendo de vital importancia los animales de la zona que servían de alimento a la población, dando origen a la gran aventura cultural y de expresión artística de estas tierras.
Todo comenzó con pinturas y grabados en placas calizas, toros, caballos y jabalíes entre otros animales, de la zona de caza de los habitantes del lugar. A diferencia del Arte Hispano-Aquitano propio de la vertiente atlántica de la Península Ibérica, cuyas imágenes se representan en paredes a gran profundidad y en lugares oscuros, en cambio el Arte Parpallonés se representa en plaquetas pequeñas que podían llevarse con ellos cuando emigraban a otros lugares, en busca de mejores tierras para la caza. En la cueva del Parpalló se han llegado a encontrar unas 5.000 plaquetas del Arte Parpallonés, justificando el Arte Paleolítico desarrollado en las tierras de la vertiente mediterránea y por tanto se ha de llamar Arte Parpallonés.
Por lo tanto lo podemos considerar como un Arte propio, con origen, estilo y con una temática totalmente particular y original de estas tierras mediterráneas.