El caldo de pescado es una deliciosa opción para disfrutar en cualquier momento. Aquí tienes una receta básica para preparar caldo de pescado:
Ingredientes:
1kg de pescado (puede ser pescado blanco, como la merluza, o una combinación de diferentes tipos de pescado)
1 cebolla grande, cortada en trozos
2 zanahorias, cortadas en trozos
2 ramas de apio, cortadas en trozos
2 dientes de ajo, aplastados
1 hoja de laurel
Sal al gusto
Pimienta al gusto
Aceite de oliva
Instrucciones:
1. En una olla grande, agrega un poco de aceite de oliva y caliéntalo a fuego medio.
2. Agrega la cebolla, zanahorias, apio y ajo a la olla. Cocina hasta que las verduras estén tiernas y ligeramente doradas.
3. Añade el pescado a la olla y cocina por unos minutos hasta que se cocine ligeramente.
4. Cubre los ingredientes con agua suficiente para cubrirlos por completo. Agrega la hoja de laurel y sazona con sal y pimienta al gusto.
5. Lleva el caldo a ebullición y luego reduce el fuego a bajo. Cocina a fuego lento durante unos 30-40 minutos para permitir que los sabores se mezclen.
6. Después de cocinar a fuego lento, retira el pescado de la olla y reserva. Puedes desmenuzarlo y agregarlo nuevamente al caldo si deseas tener trozos de pescado en el caldo.
7. Luego, pasa el caldo por un colador para eliminar las verduras y otros sólidos. Asegúrate de presionar bien los sólidos para obtener todo el líquido y los sabores.
¡Y eso es todo! Ahora tienes un delicioso caldo de pescado listo para servir. Puedes usarlo como base para sopas, arroces o disfrutarlo solo.
El fumet de pescado es muy versátil, ya que se puede utilizar para dar más sabor a los arroces de pescado, guisos como el marmitako o para pescados al horno. Los restos de pescado blanco; espinas y pieles, cabezas como las del rape, merluza, lenguado, rodaballo y abadejo...son ideales para la base del caldo.
Pero no ha que confundir el fumet con el caldo. El fumet siempre suele prepararse a partir de agua fría. Se usan las cabezas y espinas de pescado blanco, preferentemente merluza y no suele llevar sal.
En cambio, el caldo tiene un origen antiguo y ha arraigado dentro de la gastronomía más tradicional. Y un caldo se puede preparar con infinidad de ingredientes, sirve como base y como plato principal en muchos casos.