Los orígenes de la imprenta valenciana se remontan al siglo XV, coincidiendo con el auge de la imprenta en Europa. La ciudad de Valencia fue uno de los primeros lugares en la península ibérica donde se establecieron talleres de impresión.
En la calle del Portal de Valldigna, en Ciutat Vella, Valencia. se encuentra el Portal de la Valldigna, es un portal del 1400 que separaba la ciudad cristiana de la morería de Valencia, España. Se encuentra en el barrio del Carmen, en el distrito de Ciutat Vella. Es un portal sin puerta, que toma el nombre del Monasterio de Santa María de la Valldigna.
Para quienes se pregunten el origen del nombre de Valldigna. Cuenta la leyenda que, según la tradición, el rey Jaime II de Aragón, después de la guerra contra los musulmanes por tierras de Alicante y Murcia, al pasar por el valle, entonces llamado Alfàndech, impresionado por su fertilidad y belleza, dijo, dirigiéndose a su capellán el fraile Bononat de Vila-Seca y abad del monasterio cisterciense de Santes Creus: «Vall digna per a un monestir de la vostra religió». Y el abad contestó: «Vall digna!». A raíz de aquel suceso, el rey concedió las tierras al abad de Santes Creus para una nueva fundación cisterciense en el valle, cuyo nombre tomaría el de Valldigna, creando así el Reial Monestir de Santa Maria de la Valldigna, fundado por el propio rey Jaime II de Aragón el 15 de marzo de 1298. (Diputació de Valencia)
El primer libro impreso en Valencia data de 1474, titulado "Lactantii Firmiani opera" (Obras de Lactancio Firmiano), impreso por Lambert Palmart, un impresor alemán establecido en la ciudad. Este libro marcó el inicio de una próspera industria editorial en Valencia.
Uno de los impresores más destacados de la época fue Juan Viñao, quien estableció su taller en Valencia en la última década del siglo XV. Viñao imprimió numerosas obras, incluyendo textos religiosos, literarios y científicos. Durante los siglos XVI y XVII, la imprenta valenciana continuó su desarrollo, produciendo una amplia variedad de libros en diferentes géneros y temas. La ciudad se convirtió en un importante centro editorial en España, compitiendo con otras ciudades como Madrid y Sevilla.
La imprenta valenciana contribuyó significativamente a la difusión del conocimiento y la cultura en la región, produciendo obras en español, latín y otras lenguas. Además, desempeñó un papel importante en la propagación de ideas durante la época de la Reforma y la Contrarreforma.
En resumen, los orígenes de la imprenta valenciana se sitúan en el siglo XV, con la llegada de los primeros impresores a la ciudad y el inicio de una próspera industria editorial que contribuyó al desarrollo cultural y intelectual de la región.