El 9 de octubre los valencianos y valencianas celebramos la entrada triunfal en 1.238 de Jaime I a la ciudad de Valencia y el comienzo del reino cristiano. Aunque no era el fin de la conquista de todo el territorio valenciano, puesto que quedaban muchas ciudades y pueblos bajo el control de los musulmanes.
Mucho se habla de Jaime I, y parece que la historia de los valencianos empieza a partir de ese mismo momento y no es así. Porque antes había una historia que habla de otros pueblos y otros conquistadores que deseaban una tierra que era como el paraíso por sus fértiles tierras y clima templado. Los musulmanes fueron una buena parte de nuestra historia y hoy en día están presentes por todas partes. Con su llegada a Valencia se convierte, en una de las ciudades más prosperas del emirato y del califato de Córdoba. En ella y su rica región se multiplican los cultivos, beneficiados por el sistema de regadío instalado por los romanos y mejorado por los árabes. Florecen nuevos cultivos llevados por estos, como la naranja, el arroz o la remolacha. Y se trabajan el papel, la seda, la piel, el textil, la cerámica, el vidrio y el oro.
La conquista y formación del Reino de Valencia no se culminó hasta 1304-1305 con la Sentencia Arbitral de Torrellas y el Tratado de Elche, y el territorio actual no se unificó hasta 1851 con la incorporación de Requena y Utiel; pero el 9 de octubre se eligió como la fecha más representativa, por ser Valencia la capital del entonces Reino de Valencia y, actualmente, de la Comunidad Valenciana. A nivel local de Valencia, es una celebración con larga tradición desde el siglo XIV con el rey Jaime II de Aragón. En cambio, a nivel de todo el territorio de la Comunidad Valenciana, se trata de una celebración institucional contemporánea que tiene su origen en el año 1976, cuando en el Plenari de Parlamentaris se proclama para esa fecha el Día Nacional del País Valenciano.
Según el diccionario, país es el territorio que constituye una unidad geográfica o política, limitada natural o artificialmente. Patria es, además de la nación a la que uno se siente vinculado por nacimiento y ley, el lugar, ciudad o país en que se ha nacido. También lo dice el diccionario. Por tanto mi pueblo y mi tierra valenciana son mi patria. Precisamente por eso, porque sintiéndola mía, nuestra, como la siento, veo con tristeza cómo cada vez nos queda menos capacidad de reacción ante las agresiones que venimos recibiendo por parte del catalanismo y del gobierno de la nación.
Abd al-Aziz en el 711, pactó con Teodomir, un conde visigodo establecido a Oriola, por el cual se le reconocía el señorío sobre la zona a cambio de aceptar la soberanía de los árabes y de pagar tributos. Se trataba de un territorio cristiano autónomo dentro de Al-Ándalus , que contendía en la provincia de Alicante y aparte de las de Valencia, Albacete y Murcia, y que se mantuvo hasta el 779, cuando la ciudad de Valencia se sublevó y fue destruida por Abderraman I. Abd al Allah, hijo de Abderramán I, durante su gobierno hizo mejoras en la ciudad sin cambiar su forma urbanística con la excepción que construyó en las afueras de la ciudad una finca denominada la Russafa a parecido de los jardines persas, nombre que ha llegado a nuestros días.
En aquellas fechas la ciudad había empezado a decirse Balansiya, nombre que resultó de la evolución del nombre latino Valentía. Las fuentes escritas y arqueológicas de esta época son muy pocas, del que se deduce la escasa relevancia de la ciudad en ese momento. Desde semillas, la llegada de nuevos pobladores árabes y bereberes, y la creciente conversión de cristianos al Islam, permitió un mayor control del territorio por parte del emirato de Córdoba. Todavía así, hasta el siglo X (con las islamizaciones de Abderramán III) la población valenciana continuó siendo mayoritariamente cristiana. Aunque la presencia musulmana se alargó durante ocho siglos, en un contexto generalmente pacífico, hay pocos restos arquitectónicos de la época, puesto que los cristianos aprovechaban la infraestructura existente para construir sobre ella.
Fuente: universalis.mforos.com
Fuente de las imágenes: EL MUNDO