Décadas de 1980 y principios de 1990: España pasa de ser país emisor a receptor.
España era históricamente un país emisor de emigrantes (a Europa, América Latina, etc.), pero con la transición democrática y el crecimiento económico posterior, empezó a atraer inmigrantes.
Origen de los inmigrantes: Principalmente del Magreb (Marruecos), América Latina (Ecuador, Perú), y África subsahariana.