Conocer nuestros alimentos es indispensables para mejorar nuestra alimentación, de modo que cubran las expectativas higiénicas, nutricionales y organolépticas que de ellos nos hacemos. Los hábitos alimentarios han registrado desde mitades del siglo pasado cambios espectaculares. Nuestra alimentación se parece muy poco a la de nuestros antepasados, hoy se vive diferente en un mundo económicamente desarrollado, aunque no en todos los países del mundo, ya que su desarrollo no ha sido igual que  en los del primer mundo.  

El filósofo alemán Ludwig Feuerbach (1804-1872) dijo, ¿Quiere usted que las personas sean mejores? Pues entonces, en lugar de predicar contra el pecado, proporcióneles  una alimentación mejor. El hombre es según lo que come. La alimentación humana es la base de su cultura y de su orientación.

Un poco de historia: Los cítricos, son consideras plantas que tuvieron su origen en regiones tropicales y subtropicales de Asia, repartiéndose posteriormente su cultivo a diferentes zonas del mundo.  Según parece el limonero  silvestre se originó en la India y en España se inició mediante técnicas y plantas árabes, sobre el siglo XIII, con el nombre (lymon) de la palabra limón. Aunque, como cultivo comercial no se empezó  a extender hasta finales del siglo XIX por regiones de Europa y sobre todo por el Levante español. Y de Europa paso a extenderse por los Estados Unidos de América.

Clasificación: El limón pertenece a la familia de los cítricos, de la misma familia de la naranja, pomelo, mandarina y la lima. Fue en 1957 cuando se sugirió llamar críticos  a aquellas frutas de la familia rutácea  que pertenecen a los géneros Citrus, Fortunella, y Poncirus.

Vitaminas: Las vitaminas con mayor presencia en las frutas son la vitamina C y la A. Está considerado como un antioxidante, y en función de ello la industria agroalimentaria la utiliza como aditivo: concretamente  el E- 300 (vitamina C) y el E-301, E-302 y E-304 son ácido ascórbico en unión con sodio, calcio y ácido palmítico, respectivamente. 

Propiedades medicinales: Este fruto dorado, amén de quitamanchas, es un alimento medicinal.  Al tiempo que mejora las comidas o apaga la sed, remedia infinidad de problemas, mejorado el rendimiento físico e intelectual, reforzando las defensas del organismo, o aliviando anemias, migrañas, varices, obesidad, dispepsias, bronquitis, sinusitis o anginas, entre otros muchos trastornos. El tipo de  fruto que pertenece el limón se denomina hesperidio. En el interior se pueden distinguir tres partes morfológicamente diferente: Exocarpio, o flavedo, Mesocarpio o albedo, Endocarpio o pulpa.

Como cura el limón: El limón es conocido por sus propiedades curativas y beneficios para la salud debido a su contenido de vitamina C, antioxidantes y otros compuestos. Aquí hay algunas formas en las que el limón se utiliza tradicionalmente con propósitos curativos.

Vitamina: El limón es rico en vitamina C, un antioxidante que ayuda a fortalecer el sistema inmunológico y combatir los radicales libres en el cuerpo. Consumir limón regularmente puede ser beneficioso para prevenir resfriados y mejorar la salud general.

Alivio de la garganta: La mezcla de jugo de limón con miel y agua tibia es un remedio casero común para aliviar la garganta irritada. El limón puede ayudar a reducir la inflamación y proporcionar alivio temporal.

Digestión: Se cree que el limón estimula la producción de saliva y los jugos gástricos, lo que puede favorecer la digestión. Muchas personas consumen agua tibia con limón en las mañanas como parte de sus rutinas para mejorar la digestión.

Hidratación y desintoxicación: El agua con limón es una bebida popular para comenzar el día. Se dice que esta mezcla ayuda a hidratar el cuerpo, proporciona vitamina C y puede tener propiedades desintoxicantes.

Piel: La vitamina C y los antioxidantes presentes en el limón pueden ser beneficiosos para la salud de la piel. Algunas personas aplican jugo de limón en la piel para ayudar a reducir manchas oscuras y mejorar la apariencia general de la piel.

Es importante tener en cuenta que, si bien el limón puede tener beneficios para la salud, su acidez puede no ser adecuada para todas las personas, especialmente para aquellas con problemas digestivos como el reflujo ácido. Además, el uso excesivo de limón puede tener efectos adversos en el esmalte dental debido a su acidez. Como con cualquier remedio natural, es aconsejable consultar con un profesional de la salud antes de hacer cambios significativos en la dieta o adoptar nuevos hábitos.

No se sabe desde cuando se ha conocido las propiedades nutritivas y medicinales de la miel, pero con estos fines se utilizaba. La miel es conocida por sus propiedades curativas y beneficios para la salud. Aquí hay algunas formas en las que la miel se utiliza tradicionalmente con propósitos curativos:

Propiedades antibacterianas y antimicrobianas: La miel cruda contiene compuestos antibacterianos y antimicrobianos que pueden ayudar a combatir infecciones. Se ha utilizado históricamente para tratar heridas y quemaduras para prevenir infecciones y acelerar la cicatrización.

Alivio de la tos y la garganta: La miel se ha utilizado como un remedio natural para aliviar la tos y la irritación de garganta. Puede ayudar a calmar la garganta y reducir la tos, especialmente cuando se mezcla con té de hierbas o agua tibia.

Propiedades antiinflamatorias: La miel puede tener propiedades antiinflamatorias que ayudan a reducir la inflamación y la hinchazón. Esto puede ser beneficioso para condiciones como la artritis.

Mejora la calidad del sueño: Se cree que consumir miel antes de acostarse puede ayudar a mejorar la calidad del sueño. La miel libera lentamente glucosa en el hígado, lo que mantiene los niveles de azúcar en sangre estables durante la noche.

Rico en antioxidantes: La miel contiene antioxidantes que ayudan a combatir los radicales libres en el cuerpo, lo que puede contribuir a la prevención de enfermedades crónicas y al envejecimiento celular.

Tratamiento de alergias: Algunas personas creen que consumir miel local cruda puede ayudar a reducir los síntomas de las alergias estacionales. Se argumenta que al exponer al cuerpo a pequeñas cantidades de polen a través de la miel, se puede desarrollar cierta tolerancia.

Es importante tener en cuenta que no todos los tipos de miel son iguales. La miel cruda y sin procesar generalmente conserva más de sus propiedades beneficiosas en comparación con la miel procesada. Además, la miel no se recomienda para bebés menores de un año debido al riesgo de botulismo.

Aunque la miel tiene beneficios para la salud, siempre es aconsejable consultar con un profesional de la salud antes de usarla como tratamiento para condiciones médicas específicas.

La cebolla es un alimento versátil que se ha utilizado tradicionalmente por sus propiedades curativas en diversas culturas. Aquí hay algunas formas en las que la cebolla se ha utilizado con fines medicinales:

Propiedades antibacterianas y antivirales: La cebolla contiene compuestos como la alicina, que tienen propiedades antibacterianas y antivirales. Se cree que estos compuestos pueden ayudar a combatir infecciones y fortalecer el sistema inmunológico.

Alivio del resfriado y la tos: Las cebollas se han utilizado para aliviar los síntomas del resfriado y la tos. Un remedio popular es cortar una cebolla en rodajas y colocarlas en un plato cerca de la cama durante la noche. Se cree que esto puede ayudar a aliviar la congestión nasal y mejorar la respiración.

Propiedades antiinflamatorias: La quercetina, un antioxidante presente en las cebollas, tiene propiedades antiinflamatorias que pueden ayudar a reducir la inflamación en el cuerpo. Esto podría ser beneficioso en condiciones inflamatorias como la artritis.

Mejora de la salud cardiovascular: Algunos estudios sugieren que el consumo regular de cebollas puede tener beneficios para la salud cardiovascular. Los compuestos presentes en las cebollas pueden ayudar a reducir los niveles de colesterol y la presión arterial.

Propiedades antioxidantes: Las cebollas contienen antioxidantes que ayudan a combatir los radicales libres en el cuerpo. Estos antioxidantes pueden ayudar a prevenir el daño celular y contribuir a la salud general.

Alivio de picaduras de insectos: Frotar una rodaja de cebolla en una picadura de insecto puede proporcionar alivio debido a las propiedades antiinflamatorias y calmantes de la cebolla.

Es importante tener en cuenta que si bien la cebolla puede tener propiedades beneficiosas para la salud, no debe considerarse un reemplazo para el tratamiento médico convencional. Si tienes una condición médica o estás considerando usar la cebolla con fines terapéuticos, es aconsejable consultar con un profesional de la salud para obtener orientación específica. Además, algunas personas pueden ser alérgicas a las cebollas, por lo que se debe tener precaución en esos casos.

Un poco de historia: El ajo es un alimento mundialmente conocido, pero también una planta con potentes e importantes efectos medicinales. El ajo es considerado una hortaliza, pero también para mucha personas lo consideramos un medicamento. En la primera guerra mundial a falta de otros medicamentos, las cataplasmas de ajo fueron usadas para prevenir las infecciones de las heridas. Además, los estudios científicos son abrumadores a favor del ajo, ya que tiene  efectos muy beneficiosos para el ser humano.

Hábitat: Aunque no se conoce el origen del ajo ya que su origen se pierde en el tiempo, se sabe que era una  planta silvestre  y cultivo desde hace milenios. De  Candolle en su libro “Origen de las plantas cultivadas” dice que el ajo es una planta de Asia central, posiblemente del sudoeste de Siberia. Se sabe, que las grandes culturas de esta área que rodean  Asia: hacia el este, imperio chino, hacia al sur, la cultura hindú y hacia el oeste, culturas árabe y europea. 

Características: El ajo (Allium sativum) es una planta herbácea  de la familia de las liliáceas, de unos 20 a 40 cm de altura. El bulbo es compuesto y subesférico   con aproximadamente una docena de bulbillos. Toda la cabeza se halla envuelta por una membrana blanca y sedosa y la cabeza está envuelta por una nueva membrana, que la envuelve como si fuera un saco. El tallo suele medir de 20 a 40 cm de altura, con ojas largas, estrechas, envolventes. Las flores son blancas o rosadas y forman umbela o cabeza floral. Se conocen muchas especies de ajo “junco florido, el ajo blanco, el ajo pardo”.  

Cultivo: El ajo lo conocen desde el principio de los tiempos. El historiador Plinio, quien en su Historia Naturalis, explica que  el ajo para que no se convierta en una hierba hay que doblar la tallo y cubrirlo con tierra. En nuestro país se reproduce en huertos y jardines, el ajo se reproduce a partir de sus “dientes” ya que normalmente suele ser estéril y por ello no fructifica  a través de sus semillas. Cada diente se planta manteniendo una distancia entre 3 y 4 cm, y los caballones de tierra entre 25-40 cm. Y se recolecta a principios del verano, según su época de siembra. Lis ajos se secan y pierden la mitad de su peso en el secado, pero no pierde su olor y sabor.

Propiedades medicinales: el ajo elimina los parásitos intestinales como  lombriz solitaria que se mete en el cuerpo cuando una persona come o bebe algo que está infectado de gusanos o de huevos de gusanos. Una vez que está dentro del cuerpo, la cabeza de la lombriz solitaria se agarra de la pared interior de los intestinos y puede causar un grave problema de salud. Además las asombrosas cualidades del ajo, es una verdadera panacea médica son innumerables: poderoso antibiótico natural contra el reumatismo, para las afecciones del aparato digestivo y respiratorio, combate el exceso de colesterol, normaliza la tensión sanguínea y previene la arterioesclerosis.

Componentes principales: Un diente de ajo tiene 7 calorías de energía, 31 mg de proteínas, 1,4 mg de calcio, cantidades importantes de fósforo, hierro, sodio, potasio y vitaminas  B1 (tiamina) · B2 (riboflavina) · B3 (niacina) y C. Contiene cantidades reducidas de azucares y de fructosa. También contiene Alicina es lo más eficaz como antibiótico bacticida.

El ajo en la médicina: El ajo crudo es un excelente remedio que no necesita de ninguna preparación complicada.Y si deseas utilizarlo con fines medicinales, la dosis media es de unos 4 g/día (dos o tres dientes de ajo) y En cuanto a las perlas de ajo (seis al día) y que venden en herbolarios.    

Otros alimentos que curan: La noción de "alimentos que curan" a menudo se relaciona con alimentos que contienen nutrientes, antioxidantes y otras sustancias beneficiosas para la salud. Es importante destacar que aunque algunos alimentos tienen propiedades que pueden ayudar a prevenir enfermedades y promover la salud, no sustituyen la atención médica adecuada y no deben considerarse como curas milagrosas. Aquí hay algunos alimentos que se han asociado con beneficios para la salud:

Frutas y verduras: Son ricas en vitaminas, minerales y antioxidantes. Ejemplos incluyen arándanos (ricos en antioxidantes), espinacas (rica en hierro y vitaminas), y aguacates (ricos en grasas saludables).

Pescado graso: El salmón, la trucha y otros pescados grasos son ricos en ácidos grasos omega-3, que son beneficiosos para la salud del corazón y el cerebro.

Frutos secos y semillas: Almendras, nueces, chía y linaza son fuentes de grasas saludables, proteínas y fibra, y pueden ayudar a mantener la salud cardiovascular.

Ajo: Se le atribuyen propiedades antibacterianas y antiinflamatorias. Puede ayudar a reducir la presión arterial y los niveles de colesterol.

Cúrcuma: Contiene curcumina, un compuesto con propiedades antiinflamatorias y antioxidantes. Se ha estudiado por sus posibles beneficios en la prevención de enfermedades crónicas.

Yogur y alimentos fermentados: Contienen probióticos beneficiosos para la salud intestinal. Estos alimentos pueden ayudar a mantener un equilibrio saludable de bacterias en el intestino.

Té verde: Es rico en antioxidantes llamados catequinas, que se han asociado con varios beneficios para la salud, incluyendo la mejora de la función cerebral y la quema de grasa.

Brócoli: Es una verdura crucífera que contiene compuestos con propiedades anticancerígenas y antioxidantes.

Jengibre: Se ha utilizado tradicionalmente para aliviar problemas gastrointestinales y tiene propiedades antiinflamatorias.

Bayas, arándanos, fresas y frambuesas: son ricas en antioxidantes y han sido asociadas con beneficios para la salud cerebral y cardiovascular.

Es importante destacar que la clave para una dieta saludable es la variedad y el equilibrio. No hay un solo alimento que pueda proporcionar todos los nutrientes necesarios para mantener la salud. Además, es crucial consultar a un profesional de la salud antes de hacer cambios significativos en la dieta, especialmente para tratar o prevenir enfermedades específicas.

Referencia: Alimentos que curan 1997/Dr. J. Ll. Berdones/ Círculo de Lectores

Durante más de 50 años el Círculo de Lectores ha sido el gran club de lectura de nuestro país y para mucho de nosotros. Y  Qué recuerdos me trae a la mente y que tristeza por su desaparición, simplemente por el cambio de hábito de los lectores, o sea que  no compran libros de papel, ya que se lo bajan de internet.